Planeación y visión: vivir de acuerdo a un plan de vida y éxito



Planeación y visión: vivir de acuerdo a un plan de vida y éxito

 

La vida adulta trae consigo un sinfín de retos y planteamientos que, si bien complejos, nos ayudan a crecer y evolucionar sobre aquellas cosas que importan y que, eventualmente, se convierten en planteamientos puntuales: ¿quiénes somos?, ¿qué tipo de vida deseamos? Pero sobre todo una que es crucial y determinante para el futuro que es “¿en dónde y cómo quiero vivir?”.

Y si bien de primera mano adquirir el departamento de nuestros sueños pueda parecer un movimiento un tanto cuanto arriesgado, lo cierto es que se trata de una decisión que tarde o temprano terminará por alcanzarnos y que, por otro lado, nos ahorrará muchos trámites, problemas o incomodidades en el largo plazo. 

En este sentido, la sabiduría popular tiene dos refranes que vienen mucho a cuento: “quien temprano se moja, temprano se seca” y “las grandes historias sólo le suceden a quien puede y merece vivirlas”. La primera representa un ejemplo vital en cuanto a emprender con antelación el compromiso de adquirir una propiedad, la cual, además de representar un bien necesario que se aprecia con el tiempo, también configura una inversión y una protección material o financiera para el futuro. La segunda frase podría traducirse como ese confort, lujo y comodidad realizable y que es, en esencia, la calidad de la vida que deseamos y merecemos com seres humanos. 

Elegir y planificar de forma aterrizada ayuda, entre otras cosas, a darle una dirección mucho más sólida y decidida a nuestro dinero, pero también a construir un patrimonio de verdad para los nuestros, en donde una opción de calidad, con una ubicación privilegiada y un diseño excepcional, en donde las amenidades son sinònimo de seguridad y bienestar, o en donde los ambientes comunes representan la parte más vital de nuestro desarrollo como seres humanos, tarde o temprano nos encamina a una vida mucho más deseable, armónica y sustancial. 

Nuestro departamento ideal puede estar más cerca de lo que pensamos, y justo la determinación de hacer un plan a futuro de forma estratégica nos podrá despertar los primeros acercamientos con esas opciones, de acuerdo a nuestras necesidades e intereses. Esto, invariablemente nos llevará a una reflexión y análisis sobre los requisitos y capacidades de solvencia, además de diversas opciones de financiamiento para poder acceder a la propiedad que más nos convenga. 


Si tu planeación y visión de vida gira en torno a un departamento, ten en cuenta que es recomendable tener en orden tus finanzas, ya que aprovechar una oportunidad sin dudarlo te debe encontrar financieramente listo. Así, el momento adecuado puede no tener nada que ver con las estaciones o los modelos financieros, sino con que los factores requeridos se alineen a tu favor.

Por último, pero no por ello menos importante, ten en cuenta que para que tu departamento se aprecie lo suficiente en valor como para cubrir el costo de la venta, si ya decidiste que ese será parte protagónica de tu plan de vida, deberás considerarlo también como un bien claro, ya sea que vayas a vivir en él por más de cinco años, o bien adquirirlo como una fuente de ingresos segura. Esto en función de que, entre más tiempo permanezcas en la propiedad, será más probable y veloz que llegues al punto de equilibrio en cuanto a la compra de la vivienda se refiere, incluso después de pagar los costos asociados de trámites, mudanza, instalación y demás eventualidades o gastos extra.

Planificar tu futuro en función del lugar y el modo en el que deseas vivir el día de mañana, si bien representa un esfuerzo y una decisión firme e importante, te dará una tranquilidad, bienestar y seguridad de forma garantizada para toda la vida. No lo dudes.